La Navidad cada vez dura más. Es una inclinación global. Si antes el pistoletazo de salida lo daba el sorteo del Gordo y la despedida y cierre lo marcaban sus Majestades de Oriente, ahora todo empieza antes. Volvemos del puente de la Inmaculada y la Constitución y comenzamos un maratón de quedadas con amigos, cenas de compañía y reuniones familiares.
Copas con refresco bajo en calorías. Parece de Perogrullo, pero lo de pedirse una copa con un refresco sin azúcar puede reducir las calorías relevantemente. Pepe Orts, mixólogo de la empresa de botánicos para combinados Toque Especial, lo sugiere. Un mezclado de ron con cola alcanza las 154 calorías según Fatsecret. Decantarse por el refresco sin calorías lo disminuye a menos de la mitad.
George Restrepo creó una línea entera llamada SinSin de combinados en los que no hay ni una gota de contenido alcohólico ni tampoco de azúcar. Conjuntados con agua de coco. Ya hemos aclarado que las bebidas milagro no hay, pero esto no significa que el agua del coco no tenga propiedades beneficiosas. ¿De qué manera incorporarlas a su trago? Ya que con algo de imaginación. Además, evitaremos la deshidratación.
Y Otras Muy Calóricas Que Es Preferible Eludir Precaución Con El Chupito: Su Tamaño Engaña
Disfrute de nuestras enseñanzas personalizadas, breves y divertidas. Disfruta de nuestras enseñanzas adaptadas, breves y entretenidas. Cócteles con azúcar. Mojito, capirinha… Cualquier coctel con sacarosa añadida es un abrazo descarado a los kilos de más. Un mojito puede tener 220 calorías y unos 24 gramos de azúcar, al paso que la OMS sugiere no superar los 25 gramos por jornada.
Hay variedades de sidra natural que solo tienen 2 grados de contenido alcohólico. “Pensar que el tequila o el mezcal engordan menos por el hecho de que los tomamos en cantidades pequeñísimas es un error”, advierte Orts. “Hay que guiarse por el contenido en alcohol para ver cuántas calorías vamos a sumar y, en este caso, se trata de bebidas con una alta graduación”. La cantidad de energía que contribuye cada gramo de alcohol piensa 7 kilocalorías.
Todos Y Cada Uno De Los Combinados Engordan Prácticamente Lo Mismo
Y llegamos a enero con la lengua fuera. Vaya que si engordamos.
Si tomamos como referencia un vodka de 40% de contenido alcohólico, estaríamos añadiendo 96 calorías. El refresco de limón tiene dentro alrededor de 100. Por consiguiente, tendríamos un total de 200 calorías.
Bebidas on the rocks. Una solución drástica, pero muy efectiva. Si tomamos el wiski o el vodka solo con hielo , restaremos calorías de forma importante y, además de esto, estaremos mudando el modo de consumo. “Esta manera de tomar los destilados es más relajado, se tiende a saborear más la bebida, conque el ritmo asimismo se relaja”, reitera Sánchez. Tienden a ser el colofón a una comida calórica y, sí, tienen más azúcar y, por tanto, engordan más. Sánchez recomienda evitarlos a toda costa.
Ginebra con tónica. La oscilación en contenido alcohólico de las ginebras provoca que cada gin tonic sea un mundo, pero vamos a hablar de las mucho más populares, que suelen tener en torno a 47 grados. Las calorías por cada medida serían unas 115.
Diez Bebidas Para Ofrecer Hasta Las Tantas Sin Engordar
“Esta pluralidad tiene menos azúcar y, por tanto, engorda menos. Una copa solo aporta 65 calorías. Pero ojo, el espumoso francés semiseco sí que engorda”, afirma Pepe Orts. Los muy cerveceros, esos que beben las cañitas tal y como si fueran agua, tienen una solución facilísima para reducir su consumo. “Si solicitan una cerveza negra, cambia el modo perfecto de consumo, que se ralentiza, pues el contenido en alcohol es un tanto mayor. Es una pequeña trampa que nos ayuda a tomar menos”, enseña Álvaro Sánchez, de la clínica Medicadiet.
Una tónica contribuye unas 80 calorías de media por cada botellín. El gin tonic tendría, aproximadamente, unas 195 calorías, por consiguiente. Felicidades si pasará las navidades en Asturias o el País Vasco. “La sidra es la bebida alcohólica que menos graduación tiene”, enseña Sánchez. Por tanto, salir a tomar unos culines para brindar por las fiestas y proteger la línea no serán conceptos incompatibles.